TRES ELEMENTOS QUE UNEN LAS PAREJAS

Al hacer las compras en el supermercado, ir a algún centro comercial, o simplemente caminar por la calle, uno suele encontrarse con alguna pareja de ancianos. Cada vez que esto me ocurre, me pregunto cómo es que han estado juntos durante tanto tiempo, y cómo hacen para que el cariño que se tienen sea igual o más grande que el que los unió hace tantos años.

En una de mis clases, un profesor nos habló de un psicólogo que considera necesarios tres componentes para construir una relación de pareja sana, resistente y que brinde crecimiento personal para ambos. Esos tres elementos son:

1. Pasión

Y no es solo la pasión que nos brinda la intimidad y el deseo sexual (que por supuesto, también va incluida) sino ese sentimiento intenso que surge cuando algo en realidad nos gusta o queremos.

Conoce a tu pareja, sus gustos, creencias, actividades, su historia, incluso hasta lo que no le gusta. La pasión puede ser un arrebato fugaz o "cocinarse a fuego lento", producto del reconocimiento cotidiano en el otro. Siente y muestra interés por las cosas que le gustan y le hacen sentir bien a tu pareja. Involúcrate. Esto hará que ambos se sientan comprendidos y, por tanto, seguros al mostrarse como son y saberse respetados y queridos. Esto brindará confianza a su relación de pareja, y a cada uno de manera individual.

2. Intimidad

Más allá de intimar sexualmente, la intimidad es la confianza de mostrarte tal cual eres, de compartir de manera libre y total quién eres. Tener intimidad implica conocerte y conocer a tu pareja, velar y respetar por sus intereses personales, sin abandonar los tuyos.

Tocar, hablar, besarse, acariciarse… existen muchísimas formas de acercarse a otra persona. Todas ellas van formando, con el tiempo, un idioma especial y único con tu pareja, ese que solo ustedes dos entenderán.

3. Compromiso

Comprometerse completamente con la otra persona, con la relación y con uno mismo es fundamental. No es solo la promesa de estar juntos por siempre y apoyarse en todo, sino hacerlo en realidad, demostrarlo. El compromiso es la decisión de amar a una persona y mantener ese amor. Por ambos.

Apoya a tu pareja en los momentos difíciles, al igual que en ocasiones que les causen alegría. No hagas promesas que sabes de antemano que no vas a cumplir y procura que tu palabra sea valiosa. De igual manera, es necesario entender que hay situaciones que superan nuestras posibilidades, por lo que debemos ser conscientes que algunas cosas, por más que tú o tu pareja lo hayan intentado, no será posible cumplirlas.

Cuando las discusiones sean tan fuertes que parezcan no llevar a otro lugar que no sea el desastre, tranquilícense, esperen a que los ánimos bajen un poco y discútanlo calmadamente. De esta manera es más fácil llegar a un acuerdo, sin olvidar que, en ocasiones, es beneficioso (y hasta necesario) ceder, siempre y cuando no afecte de manera negativa a ninguno de los dos, o a su relación.

Crear una buena relación de pareja depende de una cantidad diversa de factores, pero ninguno funciona por sí solo. Hay que invertir ganas, tiempo y esfuerzo para lograr que sea algo duradero y satisfactorio para ambos.

Por Paola Enriquez