YO AMO A MI ESPOSO


Aún en nuestros tiempos tan disparatados y liberales, muchas mujeres nos casamos por "amor", deseando vivir felices para siempre con nuestro esposo, pero no es suficiente la atracción física o el sentirse bien en su compañía. Decir que los vamos apoyar en la tristeza y en la enfermedad hasta que la muerte nos separe, es una cosa, pero hacerlo cuando se presentan los problemas y la enfermedad, es lo que en verdad cuenta. Porque nadie nos ha enseñado afrontar los malos momentos con calma y alegría, los seres humanos deseamos tener una vida llena de amor y de comodidades, tener hijos hermosos y un matrimonio feliz. Pero es que desearlo y decirlo es muy fácil, pero realmente  ¿QUE SIGNIFICA AMAR A MI ESPOSO?

Amar a mi esposo es: respetarlo, consentirlo, servirle, serle fiel, escucharlo, entenderlo, tenerle paciencia, esperarlo, cocinarle con amor, hablarle con la verdad, apoyarlo en sus proyectos, animarlo, sostenerlo en sus caídas, levantarlo de sus fracasos, cuidar de los hijos, trasnochar si es necesario, estar en la pobreza o en la riqueza, trabajando siempre en pro de la relación y afrontar tanto los buenos momentos como los malos, cogida de su mano. En otras palabras es estar para él incondicionalmente, entregarle toda mi vida, todo lo que soy y todo lo que tengo, buscando siempre la estabilidad y felicidad de ambos.

Expresarle a diario a nuestro esposo que lo amamos, es un gesto sencillo y gratificante, que fortalece la relación, basta con un beso, una sonrisa, un abrazo y frases tales como: "buenos días mi amor", "confió en ti", "tu puedes", "gracias", "te perdono", "me encantas", "me haces feliz", "te deseo un maravilloso día", o sencillamente cada vez que te nazca dile "te amo". No es lo mismo escribirselo por wathsapp, que decírselo cuando lo tienes al frente.

Amar, es vivir por, y para esa persona que elegimos que estuviera con nosotros por el resto de nuestros días, para prosperar y tener un hogar lleno de amor y armonía, que sea capaz de resistir los altibajos de la vida.


Por Norma C. Alarcón
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